Vuelvo a las andadas con el humus. Esta vez con el de calabazas que lo encontré el pasado sábado en un restaurante libanés de aquí de Madrid. Cuando lo vi en el menú no me lo pensé dos veces y lo pedí. Es maravilloso. Su sabor es mucho más dulce que el humus tradicional y es más esponjoso. Me costó muchísimo que la cocinera me diera la receta pero al final la conseguí. Ayer la hice en casa y este es el resultado. Quizás me haya salido más cremosa que la del restaurante ( la próxima será mas con